El arte no tiene sexo y l@s artist@s, como los demás, intentan explorar, combinar y potenciar femeninidades y masculinidades en sus procesos creativos. Sin embargo, también hay artistas que siguen eligiendo centrarse en la feminidad.
En el II festival Miradas de Mujeres –además de las miradas a colecciones de y sobre mujeres ya reseñadas en otro artículo en m– se presentan varias colectivas que subrayan esta perspectiva, como Consumir preferentemente (Capella de la Misericordia, Palma de Mallorca) acerca de la relación mujer y publicidad; Maternitat (galería Espai Cavallers, Lleida); Efímero femenino (Espai B5-125, UAB, Barcelona); Dependendencias mutuas. Empleadas de hogar y crisis de los cuidados, comisariada por Esther Moreno (Centro Cultural Okendo, San Sebastián); De madonna a Madonna. (De)construcciones de lo femenino en la sociedad contemporánea (Da2 Salamanca); D-género (Escuela de Arte de San Telmo, Málaga); y Dilemas de género (Galería Central, Málaga).
Entre las individuales, además de la exposición estelar de Paloma Navares en San Sebastián, destacamos otros trabajos que nos interesan como expresiones de las edades, experiencias, recuerdos y máscaras de las mujeres en la actualidad. Aquí van algunas de las imágenes más explícitas femeninas –y feministas– del festival.
Lesley Yendell, Daintifyt, esfuerzo y delicadeza (Daintifyt Revisited, 2008 reencontrada en Ca la Dona 2013). Instalación.
La instalación en Ca la Dona de la artista inglesa afincada en Catalunya Lesley Yendell se inspira en una desaparecida fábrica de sostenes irlandesa, Daintifyt, donde trabajaron básicamente mujeres, para las que esta factoría representó una oportunidad de ganar dinero con sus habilidades como costureras. La desaparición de Daintify y de otras fábricas semejantes (fagocitadas por las multinacionales) significa también el peligro de olvido de una forma de trabajar, de un tipo de amistad y de una complicidad laboral.
Silvia Bermejo, El eco de mis mujeres
En Da2 Salamanca, la artista Silvia Bermejo presenta una serie de autorretratos, en un ejercicio de revisión y a la vez de destrucción de los estereotipos femeninos, para entrar en un espacio de autoreafirmación en el contexto de las nuevas generaciones feministas.
Vee Speers, The Birthday Party
Durante una fiesta de cumpleaños imaginaria, los niños se convierten en jefes dando rienda suelta a su imaginación. Este es un mundo anarquista que pertenece solamente a ellos. No hay adultos para dar órdenes y los niños mandan. La fotógrafa austriaca Vee Speers fotografió a su hija más joven y a sus amigos con la excusa de este cumpleaños, utilizando todo tipo de disfraces y accesorios. Los participantes crearon sus propios alter ego en una serie de fotografías en las que la pose y la mirada adulta resultan sobrecogedoras (Fnac, Madrid).
Sonia Espigores con «a(dol)esc(encia)» plantea una recopilación inconclusa de sujetos a punto de desaparecer por su cualidad cambiante y voluble a nivel físico y mental. Un papel ficticio en constante desarrollo que camina al borde –sin adentrarse aún– en la realidad del individuo fuera de las aulas (Sala Axarquía, Málaga)
A cerca de Algo así como un Ajuar, María Bueno dice: «cuento a mi hija Maiá la historia de su familia, haciéndola ‘heredera’ de sus raíces, coincidiendo con nuestra salida de España rumbo a Francia. Partir con mi hija con lo puesto, dejando atrás familia, amigos, casa y parte de nuestras vidas, teniendo que empezar prácticamente de cero, me hace pensar en la maleta del emigrante que contiene sus pertenencias y enseres personales, metáfora de Algo así como un Ajuar«.
Chechu Álava, A través del espejo, 2011
En la exposición Sisters, Chechu Álava (Asturias, 1973) prosigue con la serie de retratos que nacen de la indagación sobre ciertas feminidades, sobre la belleza de espíritu y el misterio de su individualidad, dentro de una búsqueda de identidad propia. Aparecen figuras como Marga Gil Roësset, Hannah Arendt, Camille Claudel, Simone de Beauvoir… que a su vez conviven con retratos de mujeres anónimas. La artista afirma: “hay imágenes que al encontrármelas me piden ser pintadas. A menudo son mujeres o niñas… las hermanas que no tuve, las vidas que me completan” (Galería Utopía Parkway, Madrid).
En Carácter objetual, Aida Bañuelos transforma imágenes publicitarias y de consumo empleando elementos dialécticos devaluados en el arte de hoy en día, con el propósito de reflexionar sobre el mundo de mercado en el que vivimos.
Helena Losada, Blancanieves, 2012
Helena Losada, en cambio, en su serie Upon on time nos traslada al mundo de las heroínas de cuentos y leyendas. Dimensión onírica también presente en la serie Ophelia de Eva Santín, que explora el agua como símbolo profundo del imaginario de la mujer (en 3G, Palacio de Pimentel, Valladolid).
Eva Santín, Ophelia II, 2012. Xilografía sobre impresión digital con tintas pigmentadas. 90 x 90 cm.
Más información: www.festivalmiradasdemujeres.com