Encuentros tardíos, de Elena Asins
Cuando se piensa en el transcurrir temporal, se toma conciencia de las experiencias vividas o de las que han dejado de vivirse.
En esta exposición compuesta de vídeos, instalaciones y proyectos lineales para no se sabe qué construcciones, y realizados en los últimos años, rememoro tiempos de acción en que estas cosas, su ejecución y exposición, hubiera resultado una cierta utopía. Hoy día es posible hacer hasta aquello que ni uno mismo se propone, pero que los medios posibilitan, y recuerdo la frase de Albert Einstein en la que comenta:
“Caracteriza, en mi opinión, a nuestra época la perfección de medios y la confusión de fines.”
En alguna medida, se toma una cierta discrepancia y disconformidad con las tecnologías que disfrutamos actualmente. Con el transcurrir del tiempo, las generaciones venideras disfrutarán de medios más simples, a la vez que más sofisticados y precisos.
A pesar de ello, la nueva era digital pone a nuestro alcance no sólo medios, sino contenido, ello me produce una cierta desconfianza y un temor inexplicable, a la vez que un gozo relevante y orgulloso de todo lo que uno y la máquina hacen posible. La pregunta reside en: ¿Es la máquina capaz de pensar? ¿Realmente se piensa o uno es arrastrado por sus posibilidades?
¿De qué forma procesamos y cómo nuestro cerebro almacena los conocimientos y datos adquiridos? ¿Somos acaso capaces de dominar el subconsciente?
¿La vitalidad específicamente humana, propia del yo, en un esfuerzo querido y necesitado que persigue infatigablemente algo concreto, puede perder su naturaleza por una robótica que le autolimita?
Retomo una y otra vez estas cuestiones en mi mente; ocurren tanto en la vida profesional como en el contexto escueto de nuestro estar en el mundo, de nuestro ser en el mundo, y de nuestra libertad.
Muchas de las obras aquí expuestas son totalmente inéditas, recientes, compuestas en cortos espacios de tiempo que vienen arrastrando multitud de vivencias y multitud de trabajo, y con ello me pregunto también, que por qué razón estas obras, están pautadas para una nueva forma de entender y hacer el mundo y entender y hacerse a uno mismo, no vinieron en otro tiempo, un tiempo más adecuado, menos tenso, menos ambivalente y en el que el signo, los signos eran menos reflexivos, más espontáneos, menos elementos generados por la experiencia, más distendidos. Porque cada línea, cada corte, es una decisión trascendental e irreversible, ahora.
En este ahora de los encuentros tardíos.
Elena Asins, Azpirotz, abril de 2012
Extracto del texto editado en el catalogo Elena Asins. Encuentros tardíos, Koldo Mitxelena erakustaretoa, Donostia, junio-septiembre 2012. Agradecemos a Elena Asins y al KM el permiso para la difusión de este texto en M-arteycultura visual.
Se recomienda visualizar el siguiente video:
Entrevista de Begoña Zubieta a Elena Asins en el programa Forum de EITB