Laura Salguero, Chupóptero V. Bronce y mariposa real
MIRABILIA DE LAURA SALGUERO
María Álvarez
Visitar Mirabilia de Laura Salguero (León, 1987) supone regresar al siglo XVI y adentrarse en el despacho privado de un noble coleccionista europeo. En uno de aquellos gabinetes de las maravillas donde el propietario exhibía orgulloso su muestrario de rarezas. Algo lógico en aquella época, teniendo en cuenta que la mitad del mundo aún estaba en fase de descubrimiento y cualquier espécimen que escapase a las descripciones de manual resultaba inquietante. El valor del gabinete y el prestigio de su dueño se medía entonces por el número de seres extraños que albergase. De ahí que el criterio de selección fuera tan laxo: todo aquello que presentase una apariencia ajena a las reglas naturales podía formar parte del catálogo. En la época del despegue racional, provocaba un auténtico embeleso descubrir seres que, por su morfología peculiar, deforme o monstruosa, pertenecieran más al mundo de la magia que a la realidad palpable.
Siglos después, en una sociedad que presume de tener todos los conocimientos al alcance de la mano resulta difícil encontrar un ser peculiar que no acabe minuciosamente analizado en el laboratorio. Hoy lo desconocido no despierta fascinación, sino que se considera una imperdonable asignatura pendiente. Por eso, en este mundo rendido a los científicos, donde las razones apenas dejan espacio para el saludable hormigueo que provoca lo incierto, el universo delirante de Salguero se agradece como un milagro. Porque la ciencia no ha logrado aniquilar en el hombre su innata curiosidad por aquello que habita más allá de lo comprensible. Igual que hace siglos, nuestra imaginación necesita de criaturas indescriptibles para alimentar fantasías, especímenes sin clasificar que remitan a otros mundos, fósiles inexplicables que nos inviten a inventar… Necesitamos, y quizás más que nunca, los mirabilia de Laura para sobrevivir a la oscura monotonía de la certidumbre.
Laura Salguero, Mirabilia, Galería La Atómica, Pasaje Gutiérrez 2, Valladolid. Del 27 de febrero al 14 de abril de 2014.
Comisaria: Marta Álvarez.