Cartel del seminario diseñado por Isabel Garnelo
MUJERES Y ARTE DE VANGUARDIA. DEFINICIONES DE UN ESPACIO INTERMEDIO
Mª Carmen Díaz Ruiz
Desertaré de vuestros ejércitos.
Circularé libremente por el espacio intermedio.
Y ya veremos si vuestros dioses o vuestras balas
pueden expulsarme de él.
Claude Cahun
Durante la última edición del III festival MiradaS de Mujeres fueron numerosas y variadas las propuestas e iniciativas que, teniendo a las cuestiones de género como elemento común, han conseguido afianzar a este festival a pesar su juventud. Málaga no se quedó atrás y, entre exposiciones, conferencias y actividades, celebró el seminario internacional titulado Mujeres y Arte de Vanguardia. Definiciones de un espacio intermedio en el Museo Picasso de Málaga, dirigido por Maite Méndez Baiges (Universidad de Málaga) y que contaba en su comité científico con Carla Subrizi (Università degli studi di Roma La Sapienza), Isabel Garnelo, Tecla Lumbreras, Eva Ramos y Belén Ruiz (Universidad de Málaga), todas ellas miembros del Proyecto I+D “Lecturas de la Historia del Arte Contemporáneo desde la Perspectiva de Género”. A lo largo de cinco sesiones que contaron con gran asistencia, las participantes fueron diseccionando diversos aspectos de la vanguardia en la que las mujeres tuvieron un papel destacado; en unos casos se prestó atención a la representación de lo femenino, mientras que en otros, el objeto protagonista fue su papel como artistas y productoras.
Tras la presentación a cargo de la directora académica del curso, Maite Méndez Baiges contextualizó la existencia y necesidad del presente seminario. Enmarcado dentro del proyecto I+D mencionado, ofreció un amplio abanico de propuestas a lo largo de las diferentes sesiones. La primera de ellas vino de la mano de la profesora Erika Bornay, cuya aportación a la Historia del Arte sobre temas de género es indiscutible. En su intervención sobre las mujeres fragmentadas en el surrealismo nos presenta cómo en un primer momento se construye una imagen de la mujer como mujer-niña, maga, musa o esfinge. Este interés en la atribución infantil de la mujer busca acentuar la idea de sumisión que ejercieron los surrealistas, identificando a la mujer como un fetiche. Pero esta consideración cambiará para, en una segunda etapa, focalizar su atención en el cuerpo femenino como elemento catártico de sus propios instintos o provocación. El cuerpo de mujer pierde su unidad y es rechazado en su totalidad. Como vemos, la fragmentación asociará la idea de mujer-órgano a través del proceso de desmembramiento, fragmentación, profanación y conversión en una amalgama de zonas eróticas.
Lo acontecido en los años setenta en cuestiones de género fue decisivo: colectivos artísticos y aportaciones teóricas supusieron un sustrato clave para la conformación de dicho movimiento. Italia no permanecerá fuera de esta órbita y serán diversas las iniciativas que desempeñaron un papel esencial para el desarrollo de los movimientos feministas en Italia. Gracias a la aportación de la doctora Carla Subrizi recorrimos la modernidad italiana, su contextualización y las relaciones que se establecieron entre los primeros movimientos feministas y su recepción en el ambiente artístico de los años setenta. La artista Suzanne Santoro nos ofreció su propia experiencia como participante del movimiento feminista en el contexto italiano y como fundadora de la Cooperativa Beato Angelico, consagrada al arte femenino/feminista.
Con Mercedes Valdivieso nos adentramos en la Bauhaus y la política de género que llevó a cabo. Esta iniciativa artística sin precedentes auspiciaba unos principios de libertad a la hora de escoger el taller en el que deseaban proseguir su formación tras los “cursos preliminares”. Nada más lejos de la realidad, ya que la mayoría de las alumnas se vieron condicionadas a elegir el taller de tejeduría. La profesora Valdivieso nos ilustró sobre cómo aquellas que optaron por otros talleres se encontraron con serias dificultades. Esta actitud sexista permeó de igual manera en la conformación del profesorado, estando las escasas profesoras ligadas al taller de tejeduría. Conocer a las mujeres que participaron en la Bauhaus nos muestra el papel secundario, pero igualmente importante, al que se vieron relegadas durante los años de existencia de la Bauhaus.
Uno de los elementos claves en la conformación de la vanguardia es la presencia del primitivismo. Esta idea se enlazará con lo femenino, realizando Estela Ocampo un recorrido a lo largo del arte, desvelando el conjunto de significados implicados en la unión de lo primitivo y lo femenino. Ello hizo que algunas artistas, desde una reivindicación feminista, incorporaran lo primitivo en sus obras, entendiéndolo como un ejercicio que suponía una trasgresión moral y de costumbres. Lo primitivo se yergue como lo opuesto a lo civilizado, como lo femenino supone la alteridad de lo masculino. El uso de esta asociación de ideas llevó al cuestionamiento de los valores patriarcales así como a la reivindicación de la potencia creativa de la mujer asociada a lo femenino en el universo cultural primitivo.
Dentro de este seminario, se dedicó una sesión a la realización de un cinefórum a cargo de Isabel Garnelo y de Francisco García Gómez. Se proyectaron seis películas cortas de autoras que participaron como realizadoras o diseñadoras de vestuario desde principios a mediados del siglo XX. La selección de dichas películas ha sido a tenor del carácter reivindicativo de los temas tratados en estas cintas, pudiendo afirmar sin ambages la existencia de una mirada femenina ya desde los inicios del cine. Por tanto, se aprecia ya desde muy pronto el cuestionamiento de actitudes y sentimientos tradicionalmente considerados como esenciales del sujeto femenino. La selección de autoras busca poner en valor la labor que realizaron, siendo algunas injustamente olvidadas en la actualidad. Durante el animado debate tras el cinefórum se valoró el papel que desempeñaron y sus fundamentales aportaciones al arte cinematográfico.
El seminario finalizó con la sesión a cargo de Beatriz Colomina. A lo largo de su intervención, conocimos la casa E-1027 que construyó Eileen Gray en la Costa Azul, y cómo el devenir de la historia ha silenciado y dejado en el olvido a su legítima autora en detrimento del protagonismo del que se hizo dueño Le Corbusier, que acabaría uniendo su nombre al de esta casa. El análisis de las políticas sexuales de la arquitectura moderna supuso la apertura a conocer nuevos planteamientos que todavía siguen vigentes en nuestra realidad más cercana.
A lo largo de este seminario pudimos apreciar los aconteceres que sufrieron artistas mujeres y el papel que desempeñó lo femenino en diversos aspectos de la vanguardia. Es innegable la presencia constante de las cuestiones de género, a pesar del lugar secundario que ocuparon en muchos casos. El conocimiento y difusión de estos aspectos supone un ejercicio de puesta en valor de aquellas aportaciones que no tuvieron cabida en su contexto original y la oportunidad que ofrece en aras de reflexionar y cuestionar las realidades de género en nuestro contexto artístico actual.
Seminario internacional Mujeres y Arte de Vanguardia. Definiciones de un espacio intermedio, organizado por el proyecto I+D LHACPG / HAR2011-022541 (MICINN-MINECO), en el marco del III Festival Miradas de Mujeres, con la colaboración de Universidad de Málaga y Museo Picasso Málaga. 10, 12, 17, 18 de marzo y 28 de abril de 2014.