SAN SIMÓN 62, LA PELÍCULA
Asun Requena Zaratiegui
En estos días se proyecta ininterrumpidamente en ARTIUM (Vitoria) la película de investigación, San Simón 62 de Mirari Echavarri e Irati Gorostidi. El proyecto de investigación que comienza indirectamente con su encuentro en la Universidad de Bellas Artes de Leioa, después de haber vivido de niñas en el mismo bloque de pisos, y nacido en la comunidad Arco Iris de la calle San Simón 62 en el pueblo de Lizaso. Este proyecto ya estuvo expuesto en Habitación en el Centro Huarte de Huarte (Navarra).
Sus madres llegaron allí a hacer un curso de meditación, a convivir y vivir en un nuevo modelo social copiado de los movimientos hippies americanos de los años sesenta. La comunidad Arco Iris estaba formada por gente de todas España, pero la mayoría eran del País Vasco y Navarra.
Uno de los motivos por los que la gente acudía fueron las crisis existenciales en los años 80, la crisis en el País Vasco y el cansancio en los movimientos obreros de estas personas.
La experimentación con el cuerpo fue vital. Comenta una de los testimonios donde señala la mínima información de sus familiares y de la sociedad sobre la sexualidad. No conocían nada, se vivía la primera experiencia sexual como una agresión, y la economía del placer no existía para ella en su educación. Allí descubrieron que no era así. Una de las madres de las cineastas comenta como las mujeres después del parto, ya no acudían a la meditación, de lo que sobreentiendo que las mujeres no gozaban de los mismos derechos que los hombres. Ellas abandonaban los rituales y aprendizajes por el cuidado de sus hijos, y acababan por marchar de la comunidad. Sería que la sororidad y la empatía no se habían inventado, lo digo con ironía.
El círculo formó parte de la plasticidad de las fotografías que se visualizan, además del body painting flower power en los cuerpos y la misma iconografía de colores puros y naturaleza en la fachada de la casa y en el interior. Actualmente no se puede ver ninguna pintura. Existen rastros en la fachada al descorcharse la pintura superior utilizada para tapar la simbología hippie. Actualmente es un convento de clausura masculino.
Al vaciar la casa de una de las madres, encontraron todo ese material que les llevó a querer llenar el vacío maternal del duelo que personaliza y simboliza Santa Águeda, y contarnos una parte de la historia, desde su historia y de la construcción del género femenino en Navarra, espacio nada fácil.
La película cuenta con un catálogo único gratuito y el cartel de la película. Podrá disfrutarse hasta el 18 de junio de 2023.
