12+12 CENA EN CASA DE LEVÍ
Teresa Arroyo de la Cruz
S. Marcos 2:15-20. Mientras Jesús estaba a la mesa en casa de Leví, muchos recaudadores de impuestos y pecadores comieron con él y sus discípulos, pues ya eran muchos los que lo seguían. Cuando los maestros de la Ley, que eran fariseos, vieron con quién comía, preguntaron a sus discípulos: —¿Por qué come con recaudadores de impuestos y con pecadores? Al oír esto, Jesús contestó: —No son los sanos los que necesitan médico, sino los enfermos. Y yo no he venido a llamar a justos, sino a pecadores.
¿A quién no le han invitado a un evento tipo boda, bautizo y comunión donde al no saber qué es de tu vida, o a sabiendas de que estás sólo como individuo, te han colocado en la mesa de los solteros o te han puesto el ya estipulado +1? La verdad, es que debería ser protocolo invitar al ser querido, hacer partícipe del evento a la persona que más te convenga, que más te divierta, que más te aporte. Básicamente, invitar a tu compañero perfecto en esa celebración a la que quieres ir. Algo así como perder el individualismo y con ello olvidar la vergüenza de ir sólo e, incluso, a perder algo de tu “yo” construido ante la sociedad; perder algo de “ego” (además, se pasa mejor acompañado y las penas entre dos, son menos penas, ¿no?)
Las primeras vanguardias hicieron bastante por esa pérdida del artista como genio ególatra (aunque obviamente hay ególatras y los habrá por los siglos de los siglos amén. —Hola Picasso, ¿qué tal?) .
La figura del “genio” solitario, artista renacentista o barroco, dio paso al movimiento artístico y a la querencia por la pertenencia a un grupo en el que se conformaban como tal y se apoyaban (más allá de que se odiasen algunos como en los siglos XV y XVI, o más …). Charlas, cafés, eventos y exposiciones colectivas de donde surgieron los distintos ismos eran compuestas por los diferentes artistas de cualquier lugar del mundo y en todas sus ramas técnicas y estéticas, siendo unos, complemento de otros en un sin fin de fórmulas, por ejemplo, los poetas como inspiradores de los artistas visuales o los artistas escénicos y bailarines influyendo en los cineastas o escritores.
Todo era complementarse… ¡Incluso copiarse!, influirse, ayudar al compañero, llevarle de la mano y presentarle a un comisario, a un coleccionista. Pienso en Estudio 54; ser y ser visto como en Folies Bergère… En definitiva, dar luz a quién todavía está en la sombra o simplemente como he dicho antes, no querer estar solo, pertenecer a un colectivo y pasarlo bien en sociedad.
12+12 pretende esto mismo, volver a la esencia de las primeras vanguardias y democratizar el arte, de ahí que el formato de las obras de los 24 artistas presentes en la muestra sea el mismo (50x50cm). Nadie es mejor que nadie (aunque así lo crean hasta ellos mismos). El artista invitado por la galería a la cena de Levi invita a su vez a otro artista, sin premisa ni “dress code”. Son libres de invitar a un amigo, a un artista admirado o envidiado. Son libres de querer destacar o de hacer destacar al prójimo. Ser libres de querer dar luz o sombra al compañero. Esa es la premisa: Ser libre en el +1.
Tú sabrás con quién quieres estar sentado a la mesa durante un mes en el que se intercambiaran 24 maneras distintas de expresión, donde como San Marcos plasmó: Caben amigos, discípulos, maestros, fariseos, recaudadores y pecadores. Bienvenido a la casa de Leví.
12+12, Galería Modus Operandi, C/ Lope de Vega 31, Madrid. Del 14 de septiembre al 16 de octubre de 2023.
