CONOCIENDO A… MARÍA BUENO
Esta artista de origen malagueño, estudia Bellas Artes en las universidades de Alameda en California y La Laguna de Tenerife, así como en la École des Beaux-Arts de Toulouse. Desarrolla su labor artística desde hace más de quince años, un trabajo que combina con la pedagogía y la docencia dirigida a diferentes colectivos sociales. Sus proyectos poseen una importante dimensión colaborativa y, a menudo, profundizan en la memoria familiar y colectiva. Uno de los más significativos ha sido Fridafro, realizado junto a su hija Maiá Fernandes, con el objetivo de visibilizar la historia de la comunidad negra en España a través de los puertos negreros de Andalucía. Ha publicado varios libros de Arte y Gastronomía con recetas familiares y vecinales. Es socia de MAV.
Define tu posición en el sistema del arte.
Más que definir mi posición en el sistema del arte, te diré quién soy y qué hago. Me llamo María Bueno y soy artista. Ser artista supone para mí un gran compromiso y responsabilidad que intento materializar creando, teorizando, apoyando, visibilizando e impulsando: y ello va desde concebir proyectos propios, colectivos y ajenos, hasta quedarme en segundo plano para que otros/as compañeros/as artistas ocupen la delantera.
¿Cómo ves la situación artística en tu contexto en materia de igualdad?
Siento que, además de políticas y leyes que materialicen e impulsen una verdadera igualdad, paridad y visibilidad, necesitamos generar espacios y tiempos en los que hombres y mujeres nos sentemos a dialogar. Ese diálogo debe poner sobre la mesa las piezas de un sistema desigual que atraviesa no sólo géneros, sino también razas y clases sociales entre otros aspectos. Permíteme decir que estos aspectos nos tocan en menor o mayor grado a todas las personas que co-habitan y construyen la sociedad y, por supuesto, a las personas vinculadas al arte y a la cultura.
¿Qué medidas crees que se deben tomar para equilibrar la posición de mujeres y hombres en el mercado del arte?
Cuando no hay voluntad por generar esos contextos de diálogo que mencionaba anteriormente, llega la frustración y el enfado. Entonces, en vez de pedir educadamente que se equilibre, pasamos a exigir que se tomen medidas tajantes e inmediatas de representación, de compra de arte, de participación, de porcentajes… En definitiva de equiparación.
Pero ojo, en la primera pregunta te comentaba que como mujer, a veces también me veo en la responsabilidad y ética de quedarme en un segundo plano para que compañeros hombres, de comunidades como por ejemplo la negra, estén delante y sean visibles junto al resto de comunidades que componen la sociedad española.
No olvidemos (y esto a menudo se nos olvida) que la sociedad no es solo machista, sino blanca. Y me ha costado entender que como mujer blanca, cuento con privilegios que otras mujeres no tienen cuando no son blancas (aquí planteo una cuestión de raza pero podríamos hablar de diversidad intelectual y del movimiento, orientación sexual, clases sociales desfavorecidas, etc).
¿Has sentido alguna forma de discriminación por razones sexistas?
He sentido discriminación por ser madre. Como artista y creadora no he podido optar a becas y/o residencias pero fui consciente de ello desde muy temprano. Así que desarrollé estrategias y paciencia para continuar creando, asumiendo mi lugar en el entramado artístico y optar a ellas con el tiempo.
Recomiéndanos alguna exposición que hayas visto recientemente.
He tenido la gran fortuna de ver en primicia la exposición de Verónica Ruth Frías que se inaugurará en breve (y que no pudo abrirse al público oficialmente, dadas las circunstancias que nos atraviesan). Esta se llama “Forget Princess, Call Me President” y, ¡hasta aquí puedo hablar!
Una artista que haya sido una referencia para ti.
Formando parte del Observatorio Cultural Feminista Colectiva he descubierto a algunas de mis mayores, artistas locales malagueñas a las que admiro muchísimo y que se han convertido en referentes para mí; una de ellas es Pepa Caballero. También diré que las más jóvenes a veces me sorprenden mucho, y no puedo dejar de mencionar a Nelida L. Taque Nanque.
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Una obra realizada por una autora, de cualquier disciplina, que a tu juicio sea fundamental desde la óptica de género.
Las micro-historias de Tracey Emin y Sophie Calle me interesan muchísimo. Son obras escritas por dos artistas plásticas únicas y potentes. No puedo, de igual manera, dejar de nombrar la obra “The Dinner Party” de Judy Chicago.
Algo para leer.
El manifiesto artístico “El Arte de la Interpretación Interactiva”, del artista afroespañol Justo Aliounedine Pouye Nguema (el cual firma el libro como V.R.U.S.).
Algo para escuchar.
La música de Mafly (www.mmafly.com), en especial su vídeo clip realizado en época de confinamiento, llamado “Piezas sueltas: Pantera Rosa” (https://www.youtube.com/watch?v=QGMWFwYioBU) y el sonido de los pajarillos que revolotean, desde bien temprano, el naranjo de la puerta de casa.
Algo para ver.
El documental llamado Gurumbé.
Algún proyecto en el que te hayas involucrado de forma especial.
El proyecto realizado junto a mi hija, llamado Fridafro, ha sido toda una escuela para mí y me ha marcado en los proyectos que han venido después. Proyectos centrados especialmente en el comisariado, la gestión cultural, la escritura y en el apoyo a artistas de la comunidad negra española.
¿Puedes compartir el nombre de alguna persona, colectivo, proyecto o institución que te hayan llamado la atención por sus buenas prácticas?
Tres personas cito aquí sin pestañear por compartir todas ellas una gran profesionalidad, coherencia, implicación, sensibilidad y compromiso: Susana Blas, Isabel Garnelo y Justo Aliounedine Pouye Nguema.
¿Y por sus malas prácticas?
Por sus malas prácticas, dejadez y desentendimiento absoluto relacionado con el arte señalo a los/as políticos/as de este país. No quiero ser pesimista pero hasta ahora, la política española bien poco ha hecho por cuidar, velar, proteger y valorar el arte y los/as artistas a sabiendas de que, en tiempos de crisis, el consumo de cultura está siendo crucial.
Si no tenemos una educación-estructura cultural, entendiendo esta como nuestro gran bien a salvaguardar, ¿qué podemos esperar de entidades públicas y privadas, convocatorias, jurados y personas que dan ejemplo de malas prácticas de forma reiterada?
Gracias M-Arte y Cultura Visual.
Más información:
https://mariabueno.es/
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